Fuente: La Información – España
Foto: Sener
La asociación Protermosolar, que agrupa a 13 compañías propietarias de 50 centrales, pide subastas específicas para cada tecnología o por ventanas horarias.
Puede ser el fin de un paréntesis de siete años, tiempo en el que no se ha colocado un solo espejo. El grupo vasco Sener planea construir una o dos nuevas plantas termosolares, que utilizan espejos para calentar fluidos, producir vapor y generar electricidad, a poco que el Gobierno ajuste el anunciado sistema de subastas de renovables para acomodar también a esta tecnología. Sener, que opera en el negocio solar con la empresa Torresol, es junto a Abengoa -ahora en dificultades- la punta de lanza de la promoción termosolar en España.
Las fuentes al tanto de los planes de Sener, que opera en el sector termosolar a través prinicipalmente de Torresol -60% del grupo vasco y 40% de Masdar, del grupo propietario de Cepsa, Mubadala- detallan que las nuevas plantas, con permiso del regulador, podrían más que duplicar el límite de potencia máximo establecido para las 50 plantas en funcionamiento en España, que no pueden superar los 50 MW de potencia. La Información intentó, sin éxito hasta el momento de cerrar el artículo, que Sener detallara los planes.
Sener, como el resto de compañías que operan con termosolares -Atlantica, Cobra, FCC, T Solar, etc.- tiene ante sí una oportunidad de crecimiento. El Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) prevé la instalación de 5 GW nuevos de potencia termosolar hasta 2030. La potencia instalada en España -líder en esta tecnología- se sitúa ahora en 2,36 GW. El negocio parece claro, pero todo depende de las últimas decisiones que adopte el Ministerio de Transición Ecológica sobre las subastas de renovables anunciadas para lograr el gran objetivo: 60.000 nuevos MW de potencia renovable instalada en 2030.
Todo por definir
El borrador de Real Decreto que debe dirigir el proceso de subastas está a punto de ser aprobado tras el periodo de consultas y todo está por definir. El documento deja la puerta abierta a subastas “neutras”, abiertas a todas las tecnologías y centradas en el coste de la energía. Protermosolar, la asociación en la que se integra Sener, demanda subastas específicas por tecnologías o, en su caso, subastas por ventanas horarias. Para día y para noche.
La razón es sencilla. Los generación termosolar, que emplea sales fundidas para almacenar la energía captada durante el día, puede cubrir a buen precio, aseguran, el hueco que dejan las plantas fotovoltaicas cuando no hay sol. Protermosolar, que cuenta con nuevo responsable -Gonzalo Martín-, sostiene que el coste de la energía nocturna de las termosolares se puede comparar muy favorablemente con los costes de la energía solar fotovoltaica y su almacenamiento en baterías y también con el gas.
El sector está inquieto porque teme que se repita lo que ha sucedido en Portugal con las subastas de renovables celebradas a finales de agosto, en las que, en la práctica, sostienen fuentes de Protermosolar, la letra pequeña ha beneficiado a ls energía fotovoltaica que utiliza baterías para almacenar energía. La pregunta es obvia: ¿qué sucedería en España si se repitiera el caso de Portugal y se primara la fotovoltaica sobre otras tecnologías? En Protermosolar no hay muchas dudas: no se construirían nuevas plantas y habría que pensar en el desmantelamiento de las que llegaran al fin de la vida útil en 2035-2040.
Interés inversor
Mientras el Gobierno cierra las condiciones de las próximas subastas, el interés inversor en el sector se mantiene. Un indicio de ese interés es la integración en la asociación de Acwa Power, una joint venture de capital saudí que otea también en España las oportunidades que brinda la transición energética, engrasada por los fondos comunitarios para la reconstrucción económica tras la epidemia de la Covid 19.
La presión de las termosolares para hacerse un hueco cómodo a partir de 2021 se suman a las que llevan a cabo las grandes eléctricas y los fondos para que el ministerio que dirige Teresa Ribera concrete cuanto antes las lindes del negocio para los próximos ejercicios. El proyecto de Real Decreto en debate ha provocado tensiones incluso en el seno de la Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia (CNMC) al informar sobre el borrador -algunos técnicos alertan sobre la posible sobrecapacidad en el sistema-.
Según el borrador habrá un calendario de subastas con un periodo mínimo de cinco años que se concretará por Orden Ministerial y se actualizará anualmente; el producto a subastar será la potencia instalada, la energía eléctrica o una combinación de ambas y la variable de oferta el precio por unidad de energía eléctrica. La entidad entidad administradora de las subastas será el Operador de Mercado Ibérico de Energía (OMIE) y, en teoría, se velará por la diversidad de agentes en el despliegue de renovables.